Los dildos son objetos con forma fálica que se utilizan para estimular las zonas erógenas internas. Pueden tener una apariencia realista o abstracta y, por lo general, no tienen una función mecánica como la vibración. Los dildos pueden estar hechos de una variedad de materiales, como silicona suave y flexible o látex, que es ideal para un empuje suave, de materiales firmes como piedra, acero o vidrio de borosilicato o cristal, que es perfecto para apuntar a puntos calientes que responden bien a la presión firme y para enfriar y calentar en el juego de temperatura, o de materiales de doble densidad que tienen una carcasa exterior suave que cubre un núcleo firme para una experiencia realista. Algunos dildos tienen dos extremos con diferentes texturas o formas en cada extremo para una experiencia variada o para uso simultáneo por parte de dos personas, algunos tienen una base de succión para sujetarse a superficies y algunos tienen una base ancha adecuada para usar con un arnés. Los dildos ofrecen simplicidad sin combinaciones complicadas de botones de control o configuraciones de vibración y brindan un control manual preciso.